¿Pequeño? ¡Ni siquiera existe!

Si el gap entre pro y amateur en China es tan pequeño que ni la estadística lo distingue… entonces el problema no es el fútbol.

¡Es la definición de ‘profesional’!

Mi modelo dice: si tu mejor jugador puede ser superado por un tipo que juega los domingos con sus amigos… eso no es talento. Es una crisis de sistema.

¿Y las redes? Ahí están con sus “¡Los jóvenes están emergiendo!” como si ganarle a Myanmar fuera un Mundial.

En serio, ¿quién está entrenando al equipo nacional? ¿Un grupo de vecinos con ganas?

¿Qué piensan ustedes? ¿Cuándo deja de ser “fútbol” y empieza a ser “un juego de datos sospechosos”?

¡Comenten antes de que el próximo partido sea entre dos equipos del barrio!